Los recursos de los plateros para la creación de sus obras han sido muchos y en los animales siempre se han encontrados grandes fuentes para su inspiración. Delfines, caballos, leones, cabras, serpientes, y un sinfín de animales han decorado tanto en la orfebrería civil como eclesiástica, remates, asas, mascarones o patas.

Estas últimas han despertado nuestro interés. “Las patas de la orfebrería”.

Las garras de felinos y rapaces son las de mayor representación, preferidas por muchos artífices que las han decorado con alas, bolas, mascarones, vegetales o formas geométricas, dando una apariencia de fuerza y seguridad. Otras patas quedan representadas por pezuñas de cabras, cascos de caballos, serpientes o incluso conchas de moluscos. Todas ellas de gran valor artístico.

La máxima representación de los animales en las patas de la orfebrería, está en las figuras de cuerpo entero y podemos observar una gran variedad, tortugas, leones, delfines, caballos o carneros figuran entre estos magníficos trabajos.

Y por último cabe destacar las figuras fantásticas o de sátiros, inspiradas en el arte oriental, donde la imaginación del artista da rienda suelta a configurar estas imágenes medio hombres medio animales.